El gobernador de Nebraska, Jim Pillen, anunció este viernes que el estado enfrentará una reducción en sus ingresos proyectados tras la reunión de la Junta Asesora de Pronósticos Económicos. El organismo disminuyó la previsión de ingresos en 120 millones de dólares para el año fiscal 2025-2026 y en 247 millones para el periodo 2026-2027.

Ante este escenario, el gobernador reafirmó su compromiso de mantener una administración basada en principios de austeridad y eficiencia, enfocada en reducir el gasto público y optimizar los recursos del gobierno estatal. Desde el inicio de su gestión, Pillen ha impulsado una política de control presupuestal que busca equilibrar las finanzas y aliviar la carga tributaria de los contribuyentes.

El mandatario recordó que, a inicios de año, su administración estableció la meta de generar recortes anuales por 500 millones de dólares, cifra que —según afirmó— será fundamental para avanzar en la reforma del sistema de impuestos sobre la propiedad, eliminar exenciones a grupos de interés y mantener un presupuesto equilibrado.

Con la disminución de ingresos prevista, el gobierno estatal anticipa ajustes que podrían afectar distintas áreas administrativas. Sin embargo, el objetivo principal es garantizar la sostenibilidad fiscal sin comprometer la calidad de los servicios públicos.

El gobernador planea presentar su recomendación completa de presupuesto ejecutivo a mediados de enero, junto con su mensaje anual sobre el Estado del Estado, donde se espera detalle las estrategias para enfrentar la desaceleración económica y sostener los compromisos financieros de Nebraska en los próximos años.